Existen productos para mejorar el aspecto de la piel del rostro, les hablaremos un poco de dos de ellos, la toxina botulínica o botox que se utiliza para tratar el área superior del rostro y del ácido hialurónico que se puede utilizar en cualquier zona que amerite rellenar algún surco.
TOXINA BOTULÍNICA O BOTOX
La toxina botulínica o BOTOX® que es la marca comercial registrada, es una proteína que bloquea los impulsos nerviosos de los músculos que generan las arrugas en el rostro en movimiento o conocidas líneas de expresión, que con una correcta aplicación logra suavizarlas hasta desaparecerlas.
Por lo general el tratamiento se aplica en una única sesión y los resultados suelen notarse a partir del tercer día.
El bótox tiene una duración aproximada de entre cuatro y seis meses, por lo que es aconsejable que una vez cumplido ese tiempo se repita la aplicación para potenciar los buenos resultados, es importante no inyectar la toxina botulínica más de dos veces al año para evitar la formación de anticuerpos que anulen su efecto de manera definitiva.
La edad recomendable para comenzar la aplicación de este tratamiento es a partir de los 30 años.
ÁCIDO HIALURÓNICO
El ácido hialurónico es una sustancia que se utiliza en tratamientos de belleza para mejorar el aspecto de la piel. También se utiliza para curar dolores de enfermedades como la artritis.
En estética, este producto se utiliza principalmente para el aumento de labios, eliminación de ojeras y rellenos faciales (arrugas) creando una estructura bajo la piel proporcionando una sensación de
naturalidad en las expresiones faciales.
Ambos tratamientos se realizan inyectando cantidades minúsculas con una aguja muy fina en los músculos de la zona a tratar, no necesita anestesia, no deja cicatrices ni es doloroso.