Hay personas que fuman tabaco por vicio, otras por imitación y algunas, incluso, porque se aburren. Sea cual sea la razón, las consecuencias son: enfermedades cardiovasculares, cáncer, diabetes, efectos negativos en la sexualidad masculina y femenina, enfermedades pulmonares y, por supuesto, complicaciones odontológicas.
¿Cuáles son los efectos del tabaco en el bienestar de nuestra boca?
Por todos y todas es sabido que fumar produce manchas en los dientes, sequedad por la falta de oxigenación, y halitosis, es decir, mal aliento por las modificaciones en la cantidad y calidad de la saliva. Pero, aparte de esto, ¿cuáles son los efectos del tabaco en el bienestar de nuestra boca?
Fumar favorece la aparición de caries. Es más, estas pueden aparecer incluso en los niños y niñas expuestas a un ambiente de tabaquismo. Está demostrado que desarrollan altas concentraciones sanguíneas de cotinina, duplicando el riesgo de padecer caries.
Continuamos. La enfermedad periodontal es una enfermedad crónica y progresiva que ocasiona la pérdida de los dientes. Dependiendo de su grado de afectación se denomina gingivitis o periodontitis. La primera ocurre cuando se inflama la encía pero no termina de afectar a los tejidos que sujetan el diente. La segunda es cuando el proceso inflamatorio afecta a los tejidos periodontales profundos, se destruye el hueso y los ligamentos que soportan y sujetan los dientes.
Fumar tabaco puede desarrollar cáncer de boca
La placa bacteriana y el sarro son los principales detonantes de las enfermedades periodontales crónicas. Y un medio ambiente inadecuado, como el tabaco, favorece su aparición.
¿Has oído hablar de la leucoplasia oral? Se trata de una lesión blanca de la mucosa que se puede transformar en cáncer. No es que lo digamos nosotros, es que así lo confirmó la OMS en 1994.
Comparados con los no fumadores, los fumadores de cigarros tienen 27 veces más probabilidades de desarrollar cáncer de boca, 15 veces más probabilidades de cáncer de esófago y 53 veces más probabilidades de padecer cáncer de laringe. ¿Merece la pena seguir fumando?
Si tú respuesta sigue siendo sí, seguimos.
El riesgo de padecer un cáncer de cavidad oral en un fumador es 6 veces superior al de un no fumador. Además, este cáncer es uno de los padecimientos más agresivos por los índices de mortalidad que produce, así como por las secuelas del tratamiento.
¿Te suena lo del labio leporino y el paladar fisurado? Son dos de los defectos congénitos más comunes que existen y afectan a uno de cada 1,000 niños y niñas recién nacidas. Pues bien, está comprobado que las mujeres que fuman tienen un 70% más de probabilidades de tener un bebé con uno de estos dos defectos.
Como ves, el tabaco le hace un flaco favor a la integridad de tu boca y a la de los tuyos, tanto a nivel salud, como estético. Y es que algunas de las enfermedades mencionadas derivan en graves deformaciones de la mandíbula a consecuencia de los tratamientos, y algunas pueden incluso llevar a la muerte en pocos meses.
Si fumas, esperamos haberte convencido para cuidarte un poco más. Y si no, comparte esta información. A algún ser querido podría interesarle.