La cirugía guiada se trata de una técnica moderna que ofrece mucha más precisión al momento de aplicar un implante dental. Para poder realizarla se necesita una radiografía 3D del paciente con un CBCT y un modelo en 3D de su boca.
La superposición de las imágenes del CBCT y de las muestras en 3D, permiten que el dentista pueda planificar todo el procedimiento de forma óptima, reduciendo el riesgo de errar de forma humana.
Sin este enfoque guiado, se deben hacer suposiciones para elegir que parte de la mandíbula que será utilizada para colocar el implante; con el modelo 3D, se tiene conocimiento previo a la cirugía.
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Por otro lado, también permite que el dentista superponga y planifique el espacio que necesitará para la corona y todas las estructuras que se agreguen. La mayor ventaja es que es mucho más segura.
Ventajas de la cirugía guiada
- Mayor planificación, reducción de riesgos: para llevar a cabo esta cirugía lo primero que se hace es una valoración tridimensional profunda de la anatomía del paciente.
Al tener las imágenes, se usan en un software dental de planificación, con el fin de colocar el implante virtualmente en el lugar exacto. Luego, se transfiere esta información a una impresora 3D. En solo horas se tiene una guía quirúrgica que se adapta de forma perfecta al paciente.
- Cirugía menos invasiva: al momento de operar, el dentista usará la guía individual para colocar el implante justo donde se necesita. Aparte, al tener tanta información, no es necesario abrir la encía para colocar el implante, a diferencia de la cirugía tradicional, evitando colocar puntos de sutura.
- Intervención más rápida: como se tiene una planificación exacta, los imprevistos que puedan ocurrir durante la operación se reducen considerablemente.
Tener una planificación pareja es fundamental para evitar zonas delicadas como el nervio dentario o el seno maxilar, y ayuda a lograr los mejores resultados. Una operación tradicional dura entre 1 a 2 horas, pero la cirugía guiada tarda menos de 1 hora.
- Postoperatorio más sencillo: como no es necesario levantar la encía, el postoperatorio es mucho más rápido y fácil. El paciente tiene menos riesgos de infección y las molestias se reducen considerablemente.
Como es paso a paso
- Primero el especialista debe hacer una valoración oral de forma exhaustiva y personalizada, con la ayuda de algunas pruebas se podrá determinar si la técnica de cirugía guiada es apta para el paciente y su tratamiento personalizado.
- Segundo, se realiza un estudio 3D de la boca del paciente, gracias a un escáner intraoral de última generación. Se llevan a un software CAD/CAM, el implantólogo estudia el hueso maxilar para colocar el implante. Con este método se evita tener que usar injertos o métodos que tienen un grado de complejidad mayor, además de retrasar el desarrollo del tratamiento.
- Tercero, este mismo sistema, se encarga de la fabricación de la férula quirúrgica que hará las veces de guía para insertar los implantes en la ubicación y posición planificada previamente.
Cuarto, la férula es usada el día de la intervención, evitando la apertura de la encía y permitiéndole al cirujano que solo perfore la profundidad necesaria.